Francia: Los fascistas asesinos, tras las rejas

Santiago Follet

Este viernes 14 de septiembre se dio a conocer el veredicto del caso de Clément Méric, un joven militante antifascista de 18 años, que fuera asesinado en junio del 2013, en París, a manos de un grupo de extrema derecha. En efecto, la justicia condenó a Esteban Morillo y Samuel Dufour a 11 y 7 años de prisión, respectivamente, otorgando las penas que habían sido solicitadas por el abogado general. Los dos imputados por el crimen, reconocidos “skinheads” de ideología abiertamente fascista, fueron encontrados culpables de perpetuar una brutal paliza que causó la muerte del joven Clément hace cinco años. Un tercer acusado, Alexandre Eyraud, si bien formaba parte de esta banda y se encontraba en el lugar, fue liberado por “no haber dado ningún golpe” contra la víctima.

Contrario a lo que se ha querido instalar desde algunos medios de comunicación, este crimen no se trata de una simple “pelea de bar”, sino que es la consecuencia del accionar de un grupo organizado para perpetrar una ideología de odio por medio de la violencia física. Y no se trata de un simple hecho aislado sino que tiene una importancia fundamental frente al avance que la extrema derecha viene teniendo en el terreno electoral en la figura de Marine Le Pen, promoviendo su ideología de odio e intolerancia, mientras que el gobierno de Macron refuerza el aparato represivo del Estado, reprime a los trabajadores y estudiantes que salen a luchar y profundiza sus políticas más reaccionarias persiguiendo a inmigrantes y activistas.

Por estos motivos, este fallo sirve para ponerle un freno a la avanzada derechista y para reafirmar el método de obtener justicia a través de la movilización en las calles, método que logró su resultado luego de años de lucha. Un camino que será necesario seguir profundizando en lo inmediato, para pelear contra la avanzada reaccionaria del gobierno, para frenar a la extrema derecha y para tener una sociedad libre de fascismo.

Por la memoria de Clément Méric: ¡No pasarán!