Xavi Posets SoB Barcelona
Por cuarto día consecutivo, las y los trabajadores del metal de la bahía de Cádiz y Algeciras han salido a las calles a ponerle frenos al accionar criminal de la patronal. Un accionar con la lógica capitalista que, en un momento histórico de crisis económica, social y sanitaria, pretende hacérselas pagar a sus trabajadores.
La huelga indefinida está teniendo un alto seguimiento acompañado de movilizaciones multitudinarias que han llenado las calles usando métodos directos propios de la clase obrera, como manifestaciones, cortes de vías y carreteras y piquetes. Hasta ahora, no se ha logrado ningún acuerdo con la patronal, la cual se niega a revertir la deplorable situación de recortes de derechos a sus trabajadores.
La negociación del convenio es solo la chispa que ha prendido un campo que lleva años secándose. Y es que en las últimas décadas los trabajadores del sector metalúrgico han sufrido cierres de empresas, reducciones de plantillas y bajadas de condiciones laborales. Y hace falta sumar los tratos inhumanos de las empresas, impidiendo a sus trabajadores tomar permisos para ver a familiares ingresados en hospitales, u obligando a trabajadores a pasar por accidentes domésticos los accidentes laborales.
El convenio sectorial que pretende hacer pasar la patronal conlleva eliminar una de las pagas existentes y congelar el sueldo que ha sido recortado sistemáticamente a lo largo de estos años. Dicho convenio afectará a los y las trabajadoras de grandes empresas como Navantia, Dragados o Airbus, pero también a los de empresas más pequeñas y auxiliares, abarcando a unos 22.000 trabajadores. Aceptar las condiciones de la patronal sería un duro golpe para el tejido laboral de la província de Cádiz que cuenta con un 25 % de paro y el poco trabajo que se encuentra es precarizado y mal pagado.
Por todo esto, mantener la movilización es primordial para presionar y construir una alternativa que tenga en cuenta los reclamos de las y los trabajadores. Repudiamos tajantemente la brutal represión por parte de la policía y el Estado, que demuestran estar siempre al servicio de las grandes empresas.
La huelga del sector del metal de Cádiz es clave para toda la clase trabajadora, y un ejemplo de cómo hacer valer las condiciones por una vida digna ante los que buscan ensanchar aún más sus multimillonarios bolsillos. Por eso desde Socialismo o Barbarie nos solidarizamos con las y los trabajadores que salen hoy a las calles y damos todo nuestro apoyo a esta lucha que entendemos como nuestra y que sin duda marcará un antes y un después para el resto de trabajadoras que vemos como la precarización y la sobreexplotación se vuelven cada vez más asfixiantes.
¡Todo el apoyo a la huelga de Cádiz!
¡Ni un paso atrás en la lucha del metal!
¡Basta de represión contra la clase obrera!
¡Por una vida digna contra el capital!
Ganan ellos, ganamos todos.