La huelga indefinida de los trabajadores de las contratas y subcontratas de Telefónica cumple un mes y sigue adelante. La lucha continúa a pesar de que la podrida burocracia de CCOO-UGT negoció y firmó el pasado 5 de mayo un acuerdo con la patronal de las empresas contratadas por Telefónica-Movistar (Abentel, Cobra, Comfica, Cotronic, Dominion, Elecnor, Itete, Liteyca, Montelnor y Teleco) y desconvocó su llamado a huelga. Este nuevo acuerdo-entrega no contempla las demandas y reivindicaciones iniciales de los trabajadores, no mejora ni modifica en nada las condiciones laborales precarias del sector y desconoce a los trabajadores huelguistas de los comités de huelga. Con este acuerdo se pone en evidencia una vez más el rol y la intención de la burocracia entregadora de Toxo y Méndez: reventar la huelga. Sin embargo, en los hechos, la huelga se mantiene.
Los comités de huelga y los sindicatos AST, CGT y CoBas se pronunciaron en contra del acuerdo que la burocracia pactó con la patronal a espaldas y en nombre de los trabajadores y ratificaron la continuidad de la huelga. Huelga a la que convocaron desde hace un mes y a la que CCOO y UGT se sumaron luego limitándose sólo a convocar a jornadas de huelgas parciales.
Por eso la lucha continúa pero entra en un nuevo momento. Contra la patronal que no da el brazo a torcer, contra el cerco mediático levantado por la prensa burguesa, contra el silencio y la indiferencia canalla del gobierno y los partidos en campaña preocupados por los votos y contra la burocracia sindical y su acuerdo entregador. Y todo en medio de un relajante clima electoral que se come y tapa todo.
A continuación presentamos un breve resumen de la última etapa del conflicto y de las actividades que se realizaron para darle continuidad y sostén a la huelga. Desde SoB estuvimos presentes en algunas de ellas, que se desarrollaron en Barcelona.
Un acuerdo a espaldas de los trabajadores para reventar la huelga y para que continúe la precarización laboral
“El acuerdo no se acerca ni mínimamente a las reivindicaciones de los trabajadores implicados en esta lucha, además de que tendrían que ser los trabajadores en lucha quienes se sienten a negociar con la patronal y principalmente con Telefónica. Por eso la huelga continúa, porque no nos sentimos representados por estos sindicatos”, dice Aitzol Ruiz de Azúa, presidente del comité de empresa de Cotronic Barcelona y miembro del comité de huelga de Barcelona.
Esto es así, porque los compañeros con su lucha han logrado poner en el centro de la escena la precarización laboral a la cual los somete el monstruo de las telecomunicaciones. Por eso sus reivindicaciones van en el sentido de acabar con este régimen esclavista y por eso exigen desde el primer día, entre otras cosas: La eliminación del punto. Igual trabajo, igual salario. Convenio único para todas las empresas contratadas por Telefónica, subcontratadas y autónomos. Que los autónomos que lo quieran se incorporen a la plantilla. Eliminación de las penalizaciones. Descanso de dos días a la semana. Garantías de no represalia contra las huelguistas, pues hay que recordar que la policía detuvo en sus casas de Madrid a tres compañeros huelguistas y aunque fueron liberados el mismo día se los acusó de “vulneración del derecho al trabajo”.
Pero el preacuerdo cerrado entre la burocracia y la patronal al que calificaron como “el primer marco regulador del sector” que entrará en vigor con efectos retroactivos al primero de mayo si es ratificado, va en sentido contrario. Son medidas que apuntan a mejorar las condiciones de precarización, no a eliminarla.
Así lo denunciaban los compañeros en un comunicado a través de TeleAfónica (blog gestionado por los huelguistas que centraliza y difunde el desarrollo de la huelga): “el acuerdo se ha logrado sin concretar ninguna medida contra la subcontratación, sin exigir la derogación del nefasto baremo de 2015, sin otras muchas reivindicaciones justas que han sido ignoradas (…) se mantiene la atomización del sector en varios convenios provinciales, con salario diferente (…) o se limitan las penalizaciones pero no se quitan”.
Al día siguiente de firmado el acuerdo, los tres sindicatos convocantes de la huelga indefinida decidían continuar con la misma y se realizaban asambleas de los comités de huelga en casi todo el Estado para discutir cómo se seguía. Varios comités resolvieron movilizarse a las sedes de CCOO y de UGT para manifestarles su rechazo y repudio al accionar de los sindicatos entregadores y a su acuerdo basura.
Jueves 7: Movilización contra los locales de CCOO-UGT
“Nosotros luchamos, nosotros negociamos” decía la bandera que encabezaba a más de 300 trabajadores en huelga que el jueves 7 se manifestaron con sus característicos uniformes azules en Barcelona ante las sedes de CCOO y de UGT. Huevos y pegatinas contra los cristales y la fachada del edificio. Los cánticos más coreados; “Aquí está la marea azul” y “Comisiones y UGT, sindicatos del poder”. Los calificativos más gritados: “Traidores” y “Cobardes”. Claras muestras de rabia e indignación.
Sábado 9: Ocupación de sede de Telefónica en Barcelona obliga a la patronal a convocar a una reunión
El emblemático edificio de Telefónica, sede permanente del Congreso Mundial de Móviles, fue ocupado por sorpresa y por más de nueve horas desde el mediodía por trabajadores de las contratas y subcontratas y de la plantilla en huelga de Telefónica-Movistar. La ocupación, que forzó a parar la actividad comercial del lugar, fue acompañada por varias organizaciones, activistas, colectivos y por una nutrida y permanente concurrencia de la gente que pasaba por allí y no dejaba de dar muestras de apoyo y solidaridad a los huelguistas.
“No nos marcharemos de aquí hasta que la dirección de la compañía no se siente a negociar con nosotros“, declaraba Aitzol Ruiz ante la presencia de mucha policía y de algunos medios de comunicación que, a diferencia de otros días, se presentaron para dar cobertura. Porque claro, se estaba “atentando” contra un local comercial de envergadura simbólica.
Alrededor de las 21 hs. Bruno Vilarasau, uno de los directores generales de la multinacional y Kim Faura, presidente de Telefónica en Catalunya, se sentaban a la mesa con tres miembros del comité de huelga y se comprometían por escrito a llevar a cabo una reunión el lunes 11 de mayo a las 20 hs. en Diagonal para negociar. Los compañeros desalojaron el lugar y quedaron en realizar una asamblea el mismo día lunes por la tarde antes de la reunión con la empresa.
Lunes 11: Asamblea y reunión en Diagonal
El mismo lunes al pie de Torre Calatrava en Montjuic, se realizó la asamblea que contó con la presencia de unos 350 compañeros y de delegaciones de otras comunidades del Estado como Madrid, La Rioja, Euskadi. Principalmente la asamblea resolvió ir a la reunión con la propuesta de negociar el pliego de reivindicaciones iniciales y de pedir una reunión no sólo con el comité de huelga de Barcelona sino con el comité de huelga a nivel estatal, para negociar todos juntos, de conjunto, sin división ninguna.
A las 20 hs. en Diagonal tres miembros representantes del comité de huelga se sentaban a la mesa con directivos de Telefónica. En esa reunión el planteo por parte de Telefónica fue desconocer al comité de huelga y lavarse las manos argumentando que este no es problema de Telefónica, que es un conflicto con las contratas y que por eso los compañeros debían ponerse de acuerdo con ellos. Por su parte el representante de la patronal de las contratas les comunicó a los compañeros que ellos no podían negociar ni acordar nada porque ya había un acuerdo firmado con CCOO y UGT.
Esta provocación no hizo más que indignar aún más a los compañeros que se mantienen en pie de guerra y por esto la huelga continúa.
Aquí y afuera, la misma clase obrera. Campaña internacional. Solidaridad con la huelga indefinida de l@s trabajador@s de las contratas y subcontratas de Telefónica contra la “precarización laboral”
Miles de averías, pueblos incomunicados, redes colapsadas, call centers que estallan en quejas y cientos de piquetes de uniformes azules y escaleras cortando las calles. Son las consecuencias de la extraordinaria huelga indefinida que desde el 7 de abril están llevando adelante en todo el Estado español más de 20.000 técnicos e instaladores de las empresas contratas y subcontratas que trabajan para Telefónica. Un conflicto que estalló ante el intento de ésta de bajarles el precio de su trabajo profundizando aún más las condiciones de precarización a las que está sometido el sector.
Una lucha ejemplar que logró poner en el centro de la escena el problema de la precarización laboral y que lleva más de un mes organizando movilizaciones, piquetes, escraches, ocupaciones, manteniendo las cajas de resistencia y un sin fin de actividades; que son la viva expresión de una huelga que refleja el nivel de hartazgo y combatividad de los trabajadores de las contratas y subcontratas que, escalera en mano, se plantaron y le dijeron basta al monstruo de las telecomunicaciones que recauda millones porque precariza, haciéndola responsable de su esclavitud y poniendo en el centro de la escena sus reivindicaciones: “basta de precarización laboral”, una reivindicación que igualmente los trasciende y los unifica con un amplio sector de la población que se identifica con su situación laboral y comparte sus reclamos y su lucha.
Una huelga heroica que se impuso desde abajo, por fuera y muy a pesar de los entregadores y corruptos sindicatos mayoritarios de CCOO y UGT que por supuesto ni convocaron ni apoyaron la huelga. Con el claro objetivo de reventar la huelga, el 5 de mayo pasado, la podrida burocracia negoció y firmó a espaldas de los trabajadores un acuerdo con la patronal de las contratas que deja casi intactas las condiciones de precarización y que desconoce al comité de huelga estatal de los compañeros huelguistas.
Contra este acuerdo entregador que pactó la burocracia, la inflexión de la patronal y el silencio cómplice de los medios de comunicación y de “todos” los partidos que prefieren no hablar de ellos porque están en plena campaña electoral, los compañeros ratificaron la huelga.
Un proceso muy rico y valioso que por su carácter, contenido, composición, extensión, métodos, alcance y potencialidades, se verifica como una lucha obrera nacional que ha demostrado que la clase obrera, por muy precarizada, dispersa y fragmentada que esté, puede unirse y salir a pelear arrastrando con sus reclamos a amplios sectores de la sociedad. Por esto mismo esta lucha se convierte en un importante punto de apoyo para ir más allá de la reabsorción electoral de las movilizaciones que desde años sacuden a España y Europa.
Por todo esto, más que nunca debemos rodear de apoyo y solidaridad a los trabajadores de las contratas, para que su lucha se mantenga, crezca, se fortalezca y triunfe. Para sentar un nuevo precedente en la pelea contra las patronales explotadoras, los sindicatos entregadores y los gobiernos cómplices de esta situación. Porque una victoria de los compañeros es una victoria de la clase obrera española y europea.
Desde la corriente internacional SoB continuamos a total disposición de los compañeros en huelga para que ésta siga adelante y triunfe. Porque entendemos que el internacionalismo no es un concepto abstracto, filosófico o académico, sino que debe hacerse carne en la solidaridad concreta y en el hecho de ligarse y aprender de las experiencias de lucha de la clase obrera a nivel mundial. Fuerza compañeros!!
Viva la huelga de los trabajadores de las contratas. Todo el apoyo y solidaridad con su lucha
Abajo el acuerdo entregador de la burocracia de CCOO-UGT
Reconocimiento del Comité de huelga estatal
Abajo los contratos de precarización
Desaparición de falsos autónomos y pase a plantilla de todos los trabajadores
A igual salario, igual trabajo
Un solo convenio para todos y todas lo/as trabajadore/as de las telecomunicaciones
Todo el personal de contratas a plantilla de Telefónica